miércoles, 29 de mayo de 2013

La noche de los perros encadenados

18 mayo 2013, a la(s) 14:34

 Palabras vuelven a emanar de mis momentos de reflexión como si me acompañaran mientras me siento herido y salieran por aquellas fisuras de mi ser siendo parte de mi alma, pero el dolor me hace recordar que soy humano y estoy vivo, algunas veces me sentí en dimensiones donde olvidaba mi naturaleza hasta el punto de negarme a veces, sentirme elevado en ciertos aspectos y mantener mi mente en el infinito me apartó del mundo real y junto con ello olvidé muchas cosas que ahora puedo recordar, hice lo mejor que pude y me entregué en cada acción, hice lo que sentía correcto y lo que consideré mejor y si bien quizás me equivoque en algunas decisiones creo que por algo pasan las cosas, de todo este episodio puedo rescatar mi mundo del sueño, nada de lo que me pase puede igualar como me sentí en aquella atmósfera de película llena de colores y sensaciones, como cada una de aquellas piezas fue cuidadosamente elegida, cada palabra que acompaño la salida del sol se convirtió en  recuerdos, recuerdos que están eternizados en el interior mas profundo de mi alma, cada acción que hice la hice de corazón, me entregué de a pedazos en un complejo juego de rompecabezas, cuando miro todo esto desde arriba enfrento mi paroxismo personal actual y sonrió, porque no importa lo que pase mañana, siempre he hecho el bien por los míos y por mi gente, creo sinceramente que la vida es justa y tarde o temprano comprendes tu razón de ser, tu objetivo o camino.

La experiencia ganada en cada situación es la que nos ayuda a avanzar para no tropezar nuevamente con la misma piedra y hacer las cosas bien, el mal actuar de alguien mas te puede dañar y debes aprender a curarte, vencer las dificultades, valorar a la gente que siempre esta contigo ahí y nunca creas que los vas a perder, porque si ves atrás podrás ver que nunca te abandonaron, nunca apartarse del mundo ni guardar los dolores, enfrentarlos es la mejor manera de darse el tiempo de curarse, solo puedo decir que no es una retirada del juego de la vida, volveré con nuevas perspectivas, ánimos y fuerza...

Nunca olvides que la senda personal la hace uno mismo, la meta esta cerca y la alcanzaré...

Aquel día cuando volví de la despedida comprendí el mensaje, cuando vi como un tipo soltaba a sus perros y les abrió la puerta, los vi correr libres... libres como quería ser yo nuevamente, ya espero el día en el que pueda compartir mi libertad con alguien mas, proyectarme pensando mas allá de mis metas y lograr lo que quiero, ser feliz...

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nos vemos al final del arcoiris

 la vida es cruda a veces y no nos da tiempo para maniobrar, no sabemos cuando será la ultima conversación o la ultima sonrisa que recibirem...