la vida es cruda a veces y no nos da tiempo para maniobrar, no sabemos cuando será la ultima conversación o la ultima sonrisa que recibiremos de nuestros seres queridos. y así como algunos se van de improviso el dolor de su ausencia nos acompaña, mientras avanza el tiempo aprendemos a vivir con eso y de manera inconsciente comenzamos a valorar mas los momentos. así como la vida nos quita también nos da experiencias y felicidad, es increíble como las cosas nos pueden llegar a sorprender. la memoria es un tesoro que existe para poder navegar entre sus historias. cuando ella se desvanece en el tiempo solo queda abrazar lo imperecedero, lo intangible e inmaterial. el amor de lo cotidiano, la consciencia de la existencia y los nombres que rodean nuestra cabeza.
sin lugar a dudas nos veremos nuevamente al final del arcoíris.
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