miércoles, 1 de marzo de 2017

A martillazos...


 En la forja he recibido los golpes propios de la vida, mas que eso la caída de mis idealizadas esperanzas, que me hicieron paso a paso creer en la fantasía.  de ese modo avance caminando al risco al que salte creyendo que sabia volar. confiando ciegamente en que jamas caería. traía conmigo grandes sueños. contradicciones y intuiciones que me guiaban por un extraño camino. sin miedo a perder y apostando todo avance confiando en mis capacidades...

 los golpes me hicieron maleable, el calor de la fragua ardía mientras los golpes unían mis piezas rotas, jamas perdí mi nobleza ni la pureza de mi alma. la resguarde en lo mas profundo de mi ser. en mi refugio interior atesore mi esencia y la mantuve a salvo de la tormenta. enfrentar mis miedos me hizo mas duro y junto a eso el fuelle avivo lo mas profundo de mi fuego interior, abrazando los pedazos rotos, me enfoque en proteger mi sangre y en prepararme para pelear mas duro, olvide los que algún día llame hermanos y no estuvieron a la altura. atesore la oportunidad de conocer aquellas buenas personas que alguna vez fueron perfectas en ese segundo, pero el tiempo avanza y las cosas cambian, la perfección tiene un alcance pequeño. depende de que tan embobado estés o que tan idealizada tengas la situación. la experiencia juega en tu contra cuando tienes la mirada vacía y libre de prejuicios.


aquellas vivencias forjaron mi alma y me prepararon para enfrentar de pie mis propios demonios. aquellos que alguna vez abrasé o incluso creí entender, me perdone por intentar ser super héroe y confié en que algún día será mi tiempo, mi intuición no se equivoca.




nos vemos al final del arcoiris

 la vida es cruda a veces y no nos da tiempo para maniobrar, no sabemos cuando será la ultima conversación o la ultima sonrisa que recibirem...