8 minutos y 17.7 segundos

 Los niños jugaban en las calles, la gente parecía tranquila, el transcurso de la vida seguía su apacible rutina, mientras en otros lados del globo el caos estaba presente, problemas políticos y económicos quitaban el sueño a las autoridades mundiales, la gente asistía a sus trabajos, mientras los que no poseían uno intentaban subsistir, algunos se alimentaban otros no tenían que comer, sujetos hacían negocios millonarios a cuestas de explotación de otras gentes, algunos recibían dinero por matar a otros, mientras unos arriesgaban sus vidas para salvar las de desconocidos, la mafia ganaba dinero con sus negocios mientras algunas autoridades corruptas recibían dinero por sus asociaciones ilícitas, todo funcionaba con normalidad, los países del primer mundo con sus aparentes inmejorables posibilidades a costas de la sumisión historia de los demás países, las presiones económicas y boicot hacia ciertas revueltas sociales, todo parecía estar dentro de la normalidad, pero nada haría prever lo que ocurriría la cuenta regresiva comenzaba y antes que lo notaran fue tarde, los científicos vieron incrédulos como el sol desaparecía frente a sus ojos, la vida estaba sentenciada, los siguientes 8 minutos eran los últimos para el comienzo de una agónica novela con el mas triste final, aquellos ocho minutos serian los últimos en que el ojo humano vería la luz del sol, no tenia sentido cuestionar lo ocurrido, aunque las mentes científicas intentaban explicarse tamaña situación, el tiempo seguía su curso y la oscuridad se acercaba, la noche eterna vería su reinado, la apocalíptica visión de algunos se hizo realidad, la decisión fue tomada, no se informaría nada a absolutamente nadie, los que guardaron el amargo secreto lo llevaron consigo a la tumba, el caos se genero cuando algunos extrañados notaron que el día se volvió noche, otros entre sueños nunca volverían a ver un nuevo amanecer. no existió distinción entre razas, posición económica, posición política o fama. todos tuvieron el mismo destino, aunque algunos nunca lo merecieron. nuestro planeta tomo curso desconocido disparado sin rumbo, en una interminable linea recta. mientras la superficie se congelaba todo sobre la tierra cambiaba, algunos consiguieron la preciada tranquilidad en sus credos religiosos, otros desconsolados se entregaron a su destino, muchos se arrepintieron de sus acciones y pidieron redención a los cielos, la luz esquiva nunca volvió y los vestigios de una sociedad viajaron en un planeta errante que algún día vio brillar los mas diversos tipos de vida, ahora todo eso era un recuerdo, aquella esfera celeste solo poseía oscuridad, frío y hielo....

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